Lomo de sama limpio, listo para asar a las brasas. Hoy, lo acompañaremos de un pil pil picante de acelga.
Samas que estos días nos llegan desde los puertos de Cádiz. Pese a su poco reconocimiento, estas piezas juegan en las grandes ligas de las corvinas, las urtas y los dentones.
Por los fondos donde se capturan, los pescadores que nos las traen las consideran pescado de roca. También nos avisan que estas samas en nada se parecen a las canarias. “Las de aquí son más ricas”, aseguran…

Tal y como se aprecia en la imagen, la carne presenta un equilibrio muy chulo en su composición entre matices magros y grasos. Con el frescor que aporta la acelga y la untuosidad del pil pil el plato es fabuloso.